lunes, 14 de agosto de 2023

Un libro abierto 📖🍃

 “A mí me pareció que eras un libro abierto en redes sociales”. 

Esta frase por alguna razón me quedó tan grabada en la mente desde la ultima vez que me lo dijeron… 

Yo le mandé esta imagen a esta persona, para quitarle la idea de que me podía conocer por lo que ha podido saber de mí (que realmente sí es mucho) por mi exposición en internet:


Es posible que yo solo he mostrado el color amarillo de mi vida por redes, pero cada uno le ponía su interpretación a lo que al final yo dejo y dejaba ver por redes. 

No sé por qué no logro abandonar del todo comentarios suyos como…

“Lo q dice la imagen es cierto, no se puede saber con certeza la vida de alguien con tan solo ver las redes sociales, muchas personas crean cuentas falsas o  solo muestran lo mejor de ellas”.

A mí definitivamente me ofendió su respuesta porque en lo personal me sonó pasivamente “atacante”. Es decir… su respuesta no fue: “es cierto, aparte de lo que la gente comparte en redes que suele ser sus luces, también todos tenemos nuestras oscuridades y es lo que preferimos guardar para nosotros mismos o seres cercanos/queridos”. Fue un… La gente no comparte su vida por completo en redes porque prefiere mostrar/crear una falsa realidad suya o solo aparentar que su vida es perfecta con lo bonito de ella”. Y es posible que yo la haya y esté interpretando mal. Es decir, es un hecho que muchas personas solo mostramos lo mejor de nosotros en redes porque básicamente… es lo que queremos compartir con “el mundo”. Pero el termino “o” junto al decir “se crean cuentas falsas” me hacía difícil interpretar lo anterior como otra manera de expresar que la gente voluntariamente es falsa al publicar solo cosas bonitas en sus redes.

Recuerdo incluso un comentario más suyo, pero algo vago, que decía:

 “no deberías exponer tus tristezas porque no todo el que te busca ayudar, lo quiere hacer realmente - sino aprovecharse de la situación”. 

No fue exactamente esas las palabras pero sí definitivamente algo que me llegó a querer decir. Y sí. Me sentí aludida porque yo expongo mis tristezas TAMBIÉN en redes sociales. Por un momento pensé, “ cree que lo hago para dar pena o que sientan compasión conmigo? para buscar que alguien me ayude o apoye?” y luego me decía a mí misma como respuesta a ello: “preciosa, pero si yo lo hago para acompañar a otros que sienten igual! Yo no lo hago porque me sienta la princesa del castillo que llora y busca ser rescatada!” Pero me calmé y no le dije nada de eso. Solo le dejé seguir desahogarse porque estoy segura que lo necesitaba mucho. Hoy entiendo que ese comentario ya haya sido o no dirigido para mi por esa razón o no, solo sé que cuando transmites alguna reflexión siempre parte de tu propia experiencia y lo tomé tal cual: “yo he vivido esto, y deseo que no te pase lo mismo”. Mas allá de lo que esta persona creyera de mí. En sus palabras solo me contaba un poquito de sus propias vivencias y ya. Esa al final era la única verdad en todo este juego de interpretaciones.

Sí. Soy un libro abierto en redes. Te cuento de mis momentos felices, de mi época depresiva, de mis anhelos y reflexiones. Pero no, no me creo “el personaje”. Solo soy una chica más llena de luces y oscuridades. Puedes conocer muchos de mis colores por redes, pero ya sabrás… que tengo más que un solo arcoíris si decides entrar en mi vida (y si yo también decido abrirte la puerta).

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